Descripción
4ºB es la peor clase del mundo. Y eso es así. O, al menos, eso dice la directora del colegio, la señora Bottomley-Blunt. Pero, claro, ¿qué puedes esperar de alguien que dice que al colegio se va a aprender y que debes comportarte y estar callado? ¡Pues que sea una aburrida! Por eso, puedes imaginarte lo que se enfadó cuando, en lugar de vigilar el recreo, nos convertimos en los culpables de que un retrete se desbordara y, bueno, aquello no oliera demasiado bien; o cuando decidimos «rescatar» a un pingüino el día que nos fuimos de excursión al zoo…